10 problemas frecuentes en Linux y cómo solucionarlos

Si estás inmerso en el mundo de Linux o simplemente estás considerando dar el salto, seguro que te has preguntado: ¿qué problemas podría encontrar y cómo los soluciono? Pues bien, no te preocupes, que aquí te traigo algunos de los problemas más comunes que te puedes encontrar y, por supuesto, cómo sortearlos.

No arranca el sistema después de una actualización

Imagínate: acabas de hacer una actualización y de repente, ¡pum! Tu sistema no arranca. Es un rollo, pero tiene solución. Lo más probable es que algo en el kernel o en los drivers no esté jugando limpio.

Solución: Una opción es arrancar con un kernel anterior. Cuando aparezca el menú de GRUB (gestor de arranque), selecciona una versión anterior del kernel. Si todo funciona correctamente, quizá deberías considerar quedarte con ese kernel hasta que se solucionen los problemas con el nuevo.

La conexión Wi-Fi no funciona

A veces, Linux puede ser un poco quisquilloso con los drivers de Wi-Fi. Si tu conexión no funciona, es probable que necesites instalar o actualizar el driver adecuado.

Solución: Conecta tu ordenador a Internet a través de un cable Ethernet y busca los drivers adecuados para tu tarjeta Wi-Fi. Normalmente, el gestor de controladores de tu distribución te dará opciones para instalarlos.

Problemas con la resolución de pantalla

Si tu pantalla se ve borrosa o la resolución no es la correcta, es probable que Linux no esté reconociendo correctamente tu monitor o tu tarjeta gráfica.

Solución: Ve a la configuración de pantalla de tu sistema y prueba diferentes resoluciones. Si eso no funciona, considera instalar o actualizar los drivers de tu tarjeta gráfica.

No se escucha el sonido

¿No oyes nada? ¡Vaya faena! Pero no te agobies, a menudo es fácil de solucionar.

Solución: Primero, verifica que el sonido no está silenciado y que el volumen está a un nivel adecuado. Si eso no funciona, ve al gestor de sonido y asegúrate de que la salida está configurada correctamente. Por último, si sigue sin funcionar, puede ser necesario instalar o actualizar los drivers de sonido.

No puedo instalar un programa

Linux tiene un montón de repositorios con software, pero a veces, el programa que quieres no está ahí.

Solución: Busca un paquete .deb o .rpm en la web oficial del programa. Una vez descargado, abre el centro de software de tu distribución y sigue las instrucciones para instalarlo. Si el software no ofrece paquetes para Linux, podrías probar herramientas como Wine para ejecutar aplicaciones de Windows.

El sistema se congela

Es raro, pero a veces ocurre. Si Linux se queda congelado, hay un par de cosas que puedes intentar.

Solución: Intenta cambiar a una terminal virtual pulsando Ctrl+Alt y una tecla F (de F1 a F7). Desde ahí, puedes intentar reiniciar la interfaz gráfica con sudo service lightdm restart o el comando adecuado para tu gestor de pantalla. Si eso no funciona, tal vez debas reiniciar tu máquina.

Problemas con permisos de archivos

Si recibes un mensaje que dice que no tienes permisos para acceder o modificar un archivo, no te desesperes.

Solución: Abre una terminal y usa el comando chmod para cambiar los permisos del archivo. Si no estás seguro de cómo usarlo, busca una guía sobre chmod y chown. Eso sí, ten cuidado y asegúrate de saber lo que estás haciendo.

El sistema no reconoce mi USB

A veces, al conectar un dispositivo USB, Linux no lo reconoce.

Solución: Primero, intenta conectarlo en otro puerto. Si eso no funciona, abre una terminal y teclea lsusb para ver si el sistema lo reconoce. Si aparece en la lista, puede que sólo necesites montarlo manualmente.

Errores al actualizar el sistema

En ocasiones, al intentar actualizar, puedes encontrarte con errores que impiden completar el proceso.

Solución: Abre una terminal y ejecuta sudo apt-get update y luego sudo apt-get upgrade (o los comandos correspondientes para tu gestor de paquetes). Si encuentras errores, intenta buscarlos en la web, es probable que alguien ya haya encontrado una solución.

No puedo acceder a un servidor SSH

Si te encuentras con problemas para acceder a un servidor a través de SSH, no estás solo.

Solución: Asegúrate de que el servicio SSH está activo en el servidor y de que no hay ningún firewall bloqueando el puerto 22. También es posible que debas generar o renovar las claves SSH en tu máquina cliente.

¡Y ahí lo tienes! Algunos de los problemas más comunes que te puedes encontrar al usar Linux y cómo solucionarlos. Recuerda, la comunidad Linux es enorme y siempre dispuesta a ayudar, así que si encuentras un obstáculo, seguro que hay alguien que ya ha pasado por lo mismo y puede echarte una mano. ¡Mucho ánimo y a disfrutar de Linux!